Almuerzos en la terraza, cenas al fresco o comidas a la sombra del porche. El verano invita a compartir ágapes y ratos de descanso alrededor de una mesa, con amigos o familia, y es importante preparar un agradable y acogedor ambiente, desde el menaje de mesa hasta detalles decorativos que transmiten calidez o el mejor hilo musical.
Dejando a un lado formalidades y protocolo, el verano permite poner la mesa con toques atrevidos. El mantel se cambia por caminos, manteles individuales o, incluso, bajoplatos y reposavasos; se mezclan servilletas de colores, con estampados y texturas diferentes, para dar más vida y alegría; se combinan piezas de vajillas diferentes y de colores llamativos, para aportar un punto decorativo; o se escogen vasos y copas más informales, con combinaciones de estilos diferentes. Este verano la tendencia es el cristal transparente con tonalidades claras.
Aunque el blanco y la gama de tonalidades arena siempre aportan sobriedad, añadir color a la mesa transmite la esencia del verano. Una sabia combinación de azules y blancos nos acerca a un ambiente marinero. Y los colores más vivos ¾turquesa, rosa o estampados florales con predominio del verde¾ transportan a un ambiente exótico de sabores contrastados.
Y el toque final para la mesa y el espacio en general son centros florales, guirnaldas de lucecitas, farolillos o velas.
Todo lo que necesitáis para vestir la mesa de verano lo encontraréis en Casa Viva. En la planta 2 de illa Carlemany, el centro de Andorra, descubriréis la forma de convertir la mesa de verano en un oasis.